A continuación, te explicamos cómo puedes cambiar a una carrera de facilitación desde un campo diferente.

2 Aprenda los conceptos básicos

La facilitación tiene su propio conjunto de principios y técnicas con los que debes familiarizarte. Comience por investigar los conceptos básicos de la facilitación, como establecer agendas, fomentar la participación y guiar a los grupos hacia el consenso. Hay muchos recursos gratuitos disponibles en línea que pueden brindarle una comprensión básica del rol. Además, considere la posibilidad de inscribirse en un taller o curso sobre facilitación para adquirir experiencia práctica y aprender de profesionales experimentados. Esto no solo aumentará su confianza, sino que también demostrará su compromiso con la transición a esta trayectoria profesional.

3 Gana experiencia

La experiencia práctica es invaluable, así que busque oportunidades para facilitar dentro de su trabajo actual o a través del trabajo voluntario. Podrías ofrecerte a dirigir reuniones, talleres o sesiones de capacitación en tu lugar de trabajo. Alternativamente, los grupos comunitarios locales, las organizaciones sin fines de lucro o las organizaciones profesionales a menudo buscan voluntarios para facilitar eventos y discusiones. Estas experiencias te permitirán aplicar los principios de facilitación en entornos del mundo real, construir tu currículum y proporcionar ejemplos concretos de tus habilidades de facilitación en acción.

4 Establecer una amplia red de contactos

La creación de redes es crucial en cualquier transición profesional. Conéctese con facilitadores profesionales a través de las redes sociales, asista a eventos de la industria y únase a grupos o foros de facilitación. Comprometerse con la comunidad de facilitación no solo lo ayudará a aprender de las experiencias de los demás, sino que también lo alertará sobre las oportunidades de trabajo. No dudes en ponerte en contacto con los facilitadores que admiras para pedirles consejo o incluso tutoría. A menudo, las ofertas de trabajo no se anuncian públicamente, y tener una red sólida puede darte acceso a estas oportunidades ocultas.

6 Habilidades de práctica

Por último, la práctica hace al maestro. Perfecciona tus habilidades de facilitación participando en escenarios de juego de roles, practicando con amigos o colegas, o incluso grabándote a ti mismo para autoevaluarte. Presta atención a la forma en que te comunicas, manejas las interrupciones y guías las discusiones. Cuanto más practiques, más cómodo te sentirás con los matices de la facilitación. Esta práctica continua no solo mejorará tus habilidades, sino que también te preparará para asumir con confianza un papel de facilitador cuando surja la oportunidad.