Los intereses de tu cliente chocan con los de tu equipo de consultoría. ¿Cómo manejas esta difícil situación?
En el ámbito de la consultoría de gestión, a veces puede encontrarse en un dilema: los intereses de su cliente están en desacuerdo con las recomendaciones de su equipo de consultoría. Esta delicada situación requiere un toque hábil y una navegación estratégica para garantizar que ambas partes se sientan escuchadas, respetadas y satisfechas con el resultado. La relación entre un cliente y un consultor se basa en la confianza, y el manejo de los conflictos de intereses es una verdadera prueba de esa base. Como consultor, su papel no es solo proporcionar experiencia, sino también facilitar una resolución que se alinee con los objetivos de su cliente mientras mantiene la integridad del asesoramiento profesional de su equipo.