Una vez que tenga sus requisitos, debe comprender los términos de SLA que ofrece o propone su ISP. Un SLA suele incluir los siguientes elementos: alcance del servicio, objetivos de nivel de servicio, indicadores de nivel de servicio, informes de nivel de servicio, créditos de servicio y resolución de disputas. Debes leer y analizar cada elemento cuidadosamente y compararlo con tus requerimientos. Por ejemplo, debe comprobar cómo el ISP define y mide los objetivos de nivel de servicio, como el tiempo de actividad, la latencia, la pérdida de paquetes y el rendimiento. También debe comprobar cómo el ISP informa y verifica los indicadores de nivel de servicio, como las pruebas de velocidad, las pruebas de ping y las rutas de seguimiento. Y debes revisar cómo el ISP calcula y aplica los créditos de servicio, que son las compensaciones o descuentos que recibes si no se cumplen los objetivos de nivel de servicio.