lunes, 26 de febrero de 2018

LOS BENEFICIOS DE LA RISA


-La risa produce un movimiento del diafragma que moviliza por los pulmones el doble de la cantidad de aire habitual.
-Una vibración similar se produce en el hígado, por lo que también se estimula el sistema digestivo y se facilita el proceso al segregar bilis.
-Los movimientos y contracciones actúan como masajes internos en el estómago, llegando incluso a consentir el bazo.
-En la circulación sanguínea, el efecto de la risa deriva en el fortalecimiento del corazón. Los músculos de las arterias se relajan por lo que disminuye el riesgo de hipertensión.
-La risa ejercita los músculos del rostro y ayuda a eliminar el insomnio por la pequeña fatiga que produce en el cuerpo.
-La risa funciona como antídoto de la tristeza porque activa en el cuerpo la liberación de endorfinas (o morfinas internas), sustancias neurotransmisoras 
que producen placer y levantan el ánimo al catalizar las emociones fuertes.


-Desbloquea tensiones y equilibra emocionalmente.
-Desarrolla la imaginación, intuición y creatividad
-Mejora las relaciones humanas y la calidad de vida
-Genera una actitud positiva estimulante para cambiar la forma de vida.
-Ayuda a encontrarnos mejor con nosotros mismos y con los demás.
-Refuerza la seguridad en uno mismo, así como la autoestima.
-Previene problemas digestivos, migrañas, problemas cardiovasculares, arteriosclerosis, alergias, resfriados comunes, fatiga física y mental, insomnios, fortalece el sistema inmunológico…
-Es un complemento ideal para nuestro bienestar tanto físico como mental
-Amortigua el cansancio y el agotamiento
-Ayuda a conciliar mejor el sueño
-Redescubre la alegría de jugar, recuperando la creatividad del niño interior que todos llevamos dentro.




Ejercicio: Ponemos en marcha unos 400 músculos, incluidos algunos del estómago que sólo ejercitamos con la risa.
Masaje: Los huesos de la columna vertebral y las cervicales, donde solemos acumular las tensiones, se estiran.
Limpieza: Lubricación y limpieza de los ojos con lágrimas.
Las carcajadas hacen vibrar la cabeza, despejan la nariz y el oído. También elimina toxinas del organismo.
Oxigenación: Entra el doble de aire en los pulmones y la piel se oxigena más.
Felicidad: Favorece la producción de endorfinas en el cerebro, que ayudan a un buen equilibrio psíquico de la persona. Provoca gran serenidad, reduce la ansiedad y el estrés y aumenta la creatividad.
DE MODO Y MANERA QUE… A REIR PUES

miércoles, 21 de febrero de 2018

TEORÍA: EL PESO DEL ALMA ES 21 GRAMOS



¿El alma pesa?… Es una pregunta que todavía sigue sin respuesta concreta.
Lo que sí está confirmado científicamente es la pérdida de 21 gramos en el peso de una persona a los segundos de morir.
¿Pueden corresponder estos 21 gramos al peso de nuestra alma que se aleja al exhalar nuestro último aliento?

Según la “teoría del peso del alma” del Doctor Douglas MacDougall que se remonta a 1927, todas las personas al morir perdemos 21 gramos, según su teoría éstos corresponderían al alma o espíritu que se desliga del cuerpo carnal de la persona.
El estudio fue realizado con personas moribundas que fueron pesadas antes y después de morir y en todos los casos se obtuvo el mismo resultado, todos perdían 21 gramos. Para realizar el estudio se utilizó una cama especial muy sensible a las variaciones de peso, ésta fue diseñada por el mismo.



El experimento también fue llevado a cabo con perros pero no se obtuvo el mismo resultado. Según la teoría de varios filósofos griegos, solo los humanos poseemos alma, por la capacidad de soñar. Algo por muchos discutible.
Muchos científicos no están de acuerdo con la teoría del peso del alma y aseguran que los 21 gramos corresponden al aire expulsado por el fallecido, otros apuntan a la relajación de los esfínteres como posible causa de la disminución de peso pero está totalmente descartada ya que los gases no pesan tanto.
Si esta teoría entonces es cierta, ¿a dónde irá, nuestro alma?, ¿existe la reencarnación?… Muchas preguntas y seguimos sin respuestas… ¿Tenemos Alma?
Fuente: 20minutos.es

martes, 13 de febrero de 2018

CIUDADES QUE PRONTO ESTARAN SIN AGUA POTABLE


El Banco Mundial considera que hay escasez de agua cuando se reciben menos de 1.000 metros cúbicos de agua potable anuales por persona.

CIUDAD DEL CABO
A partir del 1 de febrero, los habitantes de Ciudad del Cabo solo podrán utilizar 50 litros de agua al día. Es una de las nuevas restricciones que entrará en vigor para tratar de evitar lo que se conoce como el 'Día cero': el momento en que por primera vez los grifos de una gran ciudad del mundo podrían quedarse sin agua ante la falta de reservas.
Si los niveles en las presas no mejoran, las autoridades pronostican que a partir del 12 de abril la población tendrá que acudir a uno de los 200 puntos de distribución de agua que se abrirán en la ciudad para recoger un máximo de 25 litros diarios.
Después de varios años consecutivos con escasas precipitaciones en medio de una de las peores sequías del siglo en la región, los niveles de las presas de la ciudad cayeron en picado.
Si en 2014 se encontraban casi llenos, a inicios de este año estaban en el 28% de su capacidad.
El fenómeno meteorológico "El Niño" es el principal responsable de la situación climática que afecta a la región, y que provoca que el extremo sur de África se convierta en una de las zonas más secas.
Se calcula que desde 1995 el número de habitantes creció en torno a un 80%, de 2,4 millones a los 4,3 millones que se estima viven en la actualidad.
Según los últimos datos, solo el 40% de la población limita su consumo de agua a los 87 litros diarios recomendados actualmente.
Antes de la crisis, los residentes de la urbe usaban entre 250 y 350 litros al día, según el doctor Kevin Winter, del instituto Future Water de la Universidad de Ciudad del Cabo. Las tasas de consumo son desproporcionadamente más altas en los barrios más ricos, de baja densidad y con muchas viviendas habitadas por una sola persona. Para las zonas más pobres de la periferia, donde se concentra gran parte de la inmigración llegada de países cercanos, el 'Día cero' de consumo de agua es ya una realidad desde hace años.



SAO PAULO
La capital financiera de Brasil y una de las ciudades más populosas del mundo (con más de 21,7 millones de habitantes), atravesó una crisis parecida a la de Ciudad del Cabo en 2015, cuando la capacidad de su principal embalse cayó por debajo de 4%.
En el punto más crítico de la sequía, la ciudad tenía para menos de 20 días de suministro de agua y la policía tenía que escoltar los camiones que transportaban este líquido para evitar los saqueos.

BANGALORE INDIA
Las anticuadas tuberías de esta urbe necesitan una urgente y total renovación: un informe del gobierno nacional encontró que más de la mitad del agua potable se desperdicia.
India enfrenta un problema de contaminación de agua y las cosas en Bangalore no son diferentes: una investigación de los lagos de la ciudad descubrió que 85% de estos tenía agua que únicamente servía para irrigación y refrigeración industrial. Ni un sólo lago tenía agua adecuada para ser bebida o para el baño.

PEKÍN

En 2014, cada uno de los más de 20 millones de habitantes de Pekín recibió sólo 145 metros cúbicos de agua. Aunque China tiene 20% de la población mundial, cuenta con apenas 7% del agua potable global.
Un estudio de la Universidad de Columbia, en Estados Unidos, estimó que las reservas del país cayeron en un 13% entre 2000 y 2009. También hay contaminación: las cifras oficiales de 2015 muestran que el 40% del agua superficial de Pekín estaba contaminada hasta el punto de ni siquiera servir para la agricultura o la industria.
Las autoridades chinas han intentado atacar el problema con la creación de proyectos masivos de desviación de agua y con programas educacionales, así como el alza de tarifas para los grandes consumidores.

EL CAIRO
El río Nilo fue crucial en la creación de una de las grandes civilizaciones del mundo antiguo, pero en tiempos modernos atraviesa problemas. Es la fuente de 97% del suministro de agua en Egipto, como también es el receptor de crecientes cantidades de desperdicios no tratados provenientes de la agricultura y las zonas residenciales.
Según cifras de la Organización Mundial de la Salud, Egipto está catalogado como uno de los países, con más alta tasa de muertes relacionadas a la contaminación de agua.
La ONU vaticina que el país enfrentará una escasez crítica para 2025.

YAKARTA
Como muchas ciudades costeras del mundo, la capital de Indonesia enfrenta la amenaza creciente de la subida del nivel del mar. En Yakarta el problema es grave por la acción humana directa: debido a que menos de la mitad de los 10 millones de habitantes de la ciudad tienen acceso a la red de agua pública, la perforación ilegal de pozos está diezmando los acuíferos subterráneos, literalmente encogiéndolos. Como consecuencia, 40% de Yakarta está bajo el nivel del mar, según las estimaciones del Banco Mundial.
A este problema se le añade que los acuíferos no se estan recuperando a pesar de las fuertes precipitaciones, porque la prevalencia del asfalto no permite que los campos abiertos absorban la lluvias.


MOSCÚ
Una cuarta parte de las reservas de agua dulce del mundo están en Rusia, pero el país está plagado de problemas de contaminación causados por el legado industrial de la época soviética. Es algo que específicamente atañe a Moscú, cuyo suministro de agua depende en un 70% del agua superficial.
Los entes reguladores oficiales reconocen que entre 35% y 60% de todas las reservas de agua potable no cumplen con los estándares sanitarios.

ESTAMBUL
De acuerdo a las cifras oficiales del gobierno de Turquía, el país técnicamente atraviesa un período de estrés de agua, ya que el suministro per cápita cayó por debajo de 1.700 metros cúbicos en 2016. Los expertos locales han advertido que la situación podría empeorar y llegar a la escasez para 2030.
En años recientes, las zonas densamente pobladas como Estambul (con 14 millones de habitantes) han empezado a experimentar cortes de agua durante los meses más áridos.
Los niveles de los embalses de la ciudad se redujeron al 30% de su capacidad a comienzos de 2014.

CIUDAD DE MÉXICO
La escasez de agua no es nada nuevo para muchos de los 21 millones de habitantes en la Ciudad de México. Uno de cada cinco recibe apenas unas horas de agua del grifo y 20% tienen agua corriente durante sólo parte del día.
La ciudad importa hasta 40% de su agua de fuentes distantes pero no cuenta con la infraestructura para el reciclaje de agua desperdiciada.
La pérdida de agua debido a problemas en el sistema de tuberías se estima en 40%.



LONDRES
Con unas precipitaciones anuales de unos 600 mm (menos que París y sólo la mitad de Nueva York) Londres toma 80% de su agua para el consumo, de los ríos.
La autoridad administrativa del Gran Londres dice que la ciudad está llegando casi al límite de su capacidad y probablemente tendrá problemas de suministro para 2025 y "seria escasez" para 2040. Parece que el veto a las mangueras se volverá más común en un futuro, en Londres.

TOKIO
La capital japonesa goza de unas precipitaciones anuales parecidas a las de Seattle, una ciudad que se conoce en Estados Unidos como la "lluviosa". Sin embargo, estas precipitaciones en Tokio están concentradas en únicamente cuatro meses del año. Esa agua debe ser recolectada pues una temporada lluviosa menos intensa podría generar sequía.
Así lo hacen las autoridades de la ciudad: por lo menos 750 edificios públicos y privados en Tokio tienen un sistema de recolección y utilización de aguas lluvia.
Con sus más de 30 millones de habitantes, la red de agua de Tokio depende en un 70% del agua superficial (ríos, lagos o nieve derretida).

MIAMI
El estado de Florida se encuentra entre los más lluviosos en EE.UU. Sin embargo, en su ciudad más famosa, Miami, se está gestando un problema. El agua del océano Atlántico ha contaminado el acuífero de Vizcaya, la principal fuente de agua dulce de la ciudad.
Aunque el problema se detectó en los años 30 del siglo pasado, el agua salada todavía se filtra, particularmente porque en esa ciudad estadounidense el nivel del mar está subiendo más de lo esperado.
Fuente: bbcmundo.

martes, 6 de febrero de 2018

REFLEXIONES SOBRE LA MUERTE.- DE GONZALO GALLO G.


Vive en paz y en paz partirás, aunque te maten. 
Vive libre de apegos, odios, miedos y podrás irte sereno y sin temor.
El más allá es más acá, en un estado sutil, en una vibración más ligera, en un espacio de luz.
Al morir nadie te juzga, tú mismo te evalúas y sigues en el lento proceso de evolucionar espiritualmente.
Si quieres partir sereno, afronta desde ya los miedos a la muerte y aprende a mirarla positivamente.
Muchos, antes de partir, levantan los brazos y miran fijo al frente.  Ya ven a los seres de luz que vienen a guiarlos.
Nadie muere solo, siempre hay seres amados que vienen a llevarnos y guiarnos
Es sano llorar y en nada perturba a quien parte, si no lloras te enfermas y el dolor te sofoca y te tritura.
La muerte no se siente, es dormirse acá y despertar allá.  ¿Te das cuenta cuando te quedas dormido? 
La muerte te pide seguir amando sin un cuerpo físico.  La materia no debe ser necesaria para el amor.
La muerte no existe para el espíritu, no es más que el paso a otra dimensión de consciencia.
Es sano hablar con el difunto, pero sin aferrarlo, aceptando su muerte y despidiéndolo.
La muerte no es un castigo, es volver donde ya estábamos antes y reencontrarse con seres que amamos.

La muerte no es un fin, es un nuevo comienzo.  No es soledad, es reencuentro con seres que amas y con Dios.

viernes, 2 de febrero de 2018

NUESTRO EGO

Nuestro ego tiene la capacidad de influirnos en todas las decisiones que tomamos, y en las acciones que determinan nuestro destino. Podemos llegar a ser esclavos de nuestro ego sin darnos cuenta…
El ego representa a nuestro yo, la identidad con la que nos mostramos ante los demás y ante nosotros mismos. Está constituido por todas nuestras experiencias y aprendizajes, por todos nuestros miedos y heridas sufridas.
Mediante nuestro ego nos defendemos de aquello por lo que hemos sufrido, por lo que hemos sentido angustia y nos ha atormentado. Las humillaciones, los rencores, las desgracias, el maltrato; todo ello se ha quedado grabado en nuestro ego.
El ego se manifiesta en nosotros mediante una constante lucha por tapar las debilidades. Por mantener una apariencia de fortaleza y distanciamiento emocional.
Representa nuestra conducta más infantil, la que no ha aprendido de los errores, la que se ha quedado anclada en el pasado. Nos “protege” en asuntos como: la novedad, la intimidad, el acercamiento, el compromiso y el amor…

Cuando no tomamos conciencia de que nuestro ego puede haber adquirido el dominio de nuestra conducta, vemos como algo natural el rencor, la vanidad, la violencia, la posesión y la destrucción.

Al no responsabilizamos de nuestro ego, actuamos en modo automático, sin tomar conciencia de las consecuencias que conllevan nuestros actos. Nos alejamos de nuestra esencia, de nuestra humanidad; alimentando nuestro ego.
Acaba siendo inevitable caer en la infelicidad y el sufrimiento. Ya que el ego se alimenta de esto mismo, de la miseria, de la tortura a nuestro bienestar y nuestras posibilidades de adentrarnos en nuestra felicidad.
A través del ego nos sentimos culpables por reconocer lo que necesitamos, lo que queremos. Incluso hasta el punto de llegar a sentir culpa por entregarnos al amor.
Es nuestro juez interior más severo y la vez más injusto. Nos hace cobardes en el amor, competitivos, egoístas y desconfiados ante los demás. Nos convierte en sujetos pasivos desde la posición de víctimas.
A través del victimismo todo lo que nos sucede lo asociamos a causas externas.
Nos quitamos así toda responsabilidad de lo que sucede en nuestras vidas, regodeándonos del daño que nos han hecho.

Para poder ser personas más responsables sobre nuestras vidas y conscientes sobre nuestro desarrollo personal, no podemos eliminar el ego ni desprendernos de él, ya que forma parte de lo que somos y es algo que resulta inevitable.

El trabajo personal a realizar sería el de disminuir su influencia en nuestras vidas, y sobre todo tomar conciencia de cuándo es el ego el que está tomando la posesión de nuestros pensamientos y actos.
Al hacernos conscientes de cuando aparece la influencia del ego, es cuando podemos dominarlo y decidir la actitud que nosotros queremos tomar. Desprendiéndonos así del rol de victimas que nos engancha al sufrimiento.
Cuando somos capaces de dominar a nuestro ego nos liberamos de actitudes que nos generan sufrimiento como:
La necesidad de tener razón.
Sentirnos ofendidos por creer que los demás nos atacan.
La necesidad de ganar y triunfar para ser los mejores.
La necesidad de sentirnos superiores a los demás.
Identificarnos con nuestros logros, situando nuestro valor personal en ellos.
El deseo de la posesión y de tener más.
Si somos capaces de tomar conciencia de nuestro ego, nos situamos en el presente, sin evitarlo ni olvidar que está ahí. Amándonos no por lo que conseguimos sino por lo que somos.
Varias fuentes en la Internet